Comunicado a la opinión pública sobre la situación del Archivo General de la Nación
COMUNICADO A LA OPINIÓN PÚBLICA
UN NUEVO ATENTADO CONTRA NUESTRO PATRIMONIO HISTÓRICO Y DOCUMENTAL
Una vez más quienes están encargados de velar por la integridad de nuestro patrimonio histórico y documental, que es propiedad de todos los peruanos, como la documentación resguardada en el Archivo General de la Nación (AGN), ponen en peligro su conservación al intentar trasladarla a un local no apto para su custodia, mantenimiento y servicio, con el agravante de ser una edificación perteneciente a una empresa privada cuya finalidad es contraria a los objetivos del AGN. ¿Esto estaría significando que el AGN pasaría a ser administrado por una empresa privada?
¿Por qué no se construye el local que corresponde a un Archivo Nacional como existe en los otros países hispanoamericanos? El Estado adquirió un terreno con ese fin desde hace ya varios años, e inclusive se levantaron los planos para la construcción, pero aún falta la voluntad política de defender nuestro legado histórico. Este año se cumplen los 200 años de nuestra Independencia y, paradójicamente, las autoridades pretenden sepultar las fuentes de nuestra historia en un espacio en el cual la humedad, los roedores y quien sabe si los pirómanos no contribuyan a su destrucción.
Es tiempo de exigir que se cumpla con un deber patriótico de rescatar una documentación indispensable para nuestro trabajo histórico, trabajo que contribuye a fortalecer nuestra conciencia histórica, tan debilitada en los últimos tiempos por la poca importancia que se le da en los programas escolares al orgullo que debe fomentarse por los siglos de nuestros aportes al desarrollo cultural de la humanidad.
En el continente americano, el Perú y México están a la cabeza de las civilizaciones más importantes del Nuevo Mundo y el conocimiento de ese pasado está a punto de caer en el olvido por la desidia de quienes carecen de compromiso con sus obligaciones en Educación y Cultura. Reforcemos nuestra identidad nacional defendiendo nuestros archivos, tanto el AGN como los archivos regionales y eclesiásticos, para revalorar nuestra historia que, como la de todos los pueblos, debe llevarnos al conocimiento de la verdad, con sus luces y sombras, pero nuestra, y allí aprender de nuestros errores, y exaltar nuestros éxitos.
Frente a los problemas que nos aquejan desde hace ya largo tiempo, unámonos en defensa de nuestro patrimonio histórico, cultural y documental, que si hoy desaparece será irrecuperable. Honremos nuestro Bicentenario apoyando a las instituciones que permanentemente cobijan nuestro legado histórico, porque no tiene duplicado.
Lima, 19 de abril de 2024
Margarita Guerra Martiniére,
Presidente de la Academia Nacional de la Historia